¿Para qué sirve el Té de Cebolla?

El interés por alimentos beneficiosos para la salud se ha incrementado por numerosos factores, entre ellos el efecto protector que posee una alimentación saludable sobre el desarrollo de enfermedades crónicas no transmisibles. Una de esas preparaciones beneficiosas podría ser el té de cebolla.

La célebre frase “deja que los alimentos sean tu medicina y la medicina tu alimento” ha evolucionado y, en la actualidad es creciente el interés por los llamados alimentos funcionales, que se define como aquel alimento que posee un efecto benéfico sobre una o varias funciones específicas del organismo de la persona que lo consume.

La cebolla es considerada uno de ellos. Forma parte de la familia de las liliáceas, a la que pertenece también el ajo y el puerro.

Presenta un escaso aporte energético. No obstante, se destaca su contenido vitamínico y mineral. Es fuente de potasio, mineral implicado en el adecuado funcionamiento de los músculos y del sistema nervioso. También contiene vitamina C, sin embargo, es una vitamina termolábil por lo que su aporte disminuiría si la cebolla se consumiese cocinada. 

Otros componentes bioactivos que se destacan son los flavonoides, y las sustancias azufradas, responsables de su aroma. Entre los flavonoides, las antocianinas y la quercetina, se reconocen por su importante función antioxidante. Estas sustancias tienen un efecto antimicrobiano, mucolítico y expectorante cuando llegan a las vías respiratorias por lo que es muy común el uso del té de cebolla como tratamiento casero del resfrío, la gripe y otras afecciones respiratorias.

¿Cómo preparar té de cebolla?

1. En una jarra, verter el agua potable y someter a fuego directo.

2. Una vez que alcance la temperatura de ebullición, agregar la cebolla previamente pelada y cortada en trozos.

3. Retirar la jarra del fuego y esperar unos minutos.

4. Filtrar la infusión y servir con miel (o el endulzante que desees).

De todas formas, si bien es cierto que la cebolla es empleada tradicionalmente por muchas personas, por las propiedades previamente mencionadas, es necesario contar con más evidencia científica que respalde dichas funciones. Recordemos también que, el rol de la dieta en la salud y en la prevención de la enfermedad es consecuencia de toda la matriz alimentaria consumida y no, de la ingesta de un sólo alimento aislado.